martes, 5 de noviembre de 2013

MEMORIAS DE UN PARADO CCC - Salamanca -

Esta mañana hacía una temperatura mas que agradable, cuando he salido de casa a las 6,45 de la mañana, para poder pillar el Bus e ir a Salamanca.

En la Ciudad hacía sol, aunque paulatinamente se ha ido nublando y cuando me he venido a las 17,30 amenazaba lluvia.

He ido, por fin, a sacarme esa verruga tan molesta que tenía en la cintura. Todo ha ido bien. Utilizaron anestesia y bisturí eléctrico conmigo, además de servir de conejillo de indias para dos estudiantes que hicieron prácticas conmigo.

Lo de los hospitales es un negocio floreciente en Castilla y León, ya que se les van quedando pequeños los edificios y se encuentran los nuevos mas las ampliaciones en permanente estado de obras, ascensores y pasadizos.

Yo tenía que ir al Hospital Clínico, pero hay otro edificio enorme que se llama Virgen de la Vega y otro mas pequeño que no se como se llama.

Donde yo fuí era como un hormiguero de gente que entraba y salía, con varias plantas hacia arriba y varias plantas hacia abajo, porque a mi me enviaron a dermatología en el sótano dos, pero seguían mas escaleras hacia abajo.

Después, pues a vaguear, pero como me dejo engañar por la gente de Pereña, pues así me van las cosas.

Solo hay un coche de línea en el día, menos los jueves, sábados y domingos.
El servicio lo presta una empresa chiquitita que se llama "Empresa Garrido" y es como una "low cost" de los coches de línea, en todo menos en el precio que son 7,80€ para 90km. No hay ida i vuelta, por lo que la broma sale por un pico. Sale a las 7 de la mañana de Pereña y llega un poco antes de las 9 a Salamanca.
Sale a las 17,30 de Salamanca y llega un poco antes de las 19 horas a Pereña.

Si a eso le cuentas, que obligatoriamente hay que comer fuera (o no comer esa es la alternativa), sale mucho mejor el vehículo propio. Además, por la zona de los Hospitales había sitio donde aparcar. Igual hay que dar alguna vuelta, pero Salamanca no es Manhattan y seguro que se encuentra algún sitio.

Además, no se lo que durará esta línea, porque apenas eramos 6 personas cuando llegamos a Salamanca y 3 la mayor parte del viaje.

Con esta manía que les ha entrado a nuestros políticos con eso de recortar los servicios deficitarios, cualquier día nos cortan el coche de línea y a ver como se desplaza la gente que lo necesite.

Hablando con mi prima, comentábamos el tema, sobre los servicios públicos y yo le argumentaba: "¿Te imaginas que el agua fuese un servicio deficitario y decidieran cortarlo?". Mi prima muy astutamente me contestaba: "no les des ideas que son capaces de hacerlo"

En el tiempo que estuve ocioso me di cuenta de la mayoría de juventud que habita la Ciudad y es que se habla de una población de 30 mil estudiantes, por lo que la industria del alquiler de habitaciones también es floreciente, supongo que con la de Residencias de Ancianos, porque por la calle, ciertamente se veían pocos.

Por muchos balcones se veía: "habitaciones con baño, wifi, televisión...." como forma de atraer al estudiante y si es extranjero mucho mejor.

Tampoco queda en la Ciudad comercio tradicional. Ha ido desapareciendo por culpa de la crisis, de las jubilaciones y de estar hasta los mismísimos de que no entraran Clientes. Y esto si que no es un servicio público que se pueda recortar, si entra se gana y si no entra se palma dinero, pero hasta un cierto límite, porque llega un momento que resulta mejor cerrar que seguir palmando cada día.

Buscaba una ferretería de esas de barrio que me asesoraran para restaurar un mueble y me dieran pasta de madera, normal, no de esa que viene en un "blister" que te cobran en el precio mucho mas de lo que vale la mercancía porque viene muy bien cerradito y plastificado. Vaya timo.

También buscaba una tienda de ropa de casa, de esas de toda la vida, no Zara Home, para ver faldillas para la mesa camilla, que en Catalunya no se venden y las que hay por esta zona son de Mataró. Tampoco hallé semejante, supongo que reliquia (la tienda no las faldillas)

Mientras tanto, en mis largos paseos, había un señor hablando por el móvil, a grito pelado, claro, porque si no, no me hubiera enterado de la conversación, indignadísimo con la última ocurrencia del ministro Wert sobre las becas Erasmus. Lo que mas me sorprendió (aunque no debería ocurrir a estas alturas de la película) es que el señor decía que había sonsacado (sic) a algunos estudiantes de Erasmus, extranjeros y que concretamente un belga se llevaba algo así como 700 euros cada mes, mientras que un español apenas llegaba a los 300 euros.

Osea que un estudiante belga puede vivir fenomenal en España con su beca y un estudiante español tiene que buscarse la vida para poder sobrevivir. Cada día lo ponen mas fácil.


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