Esta mañana hace sol, pero sigue el aire frío. He tenido que hacer mi colada, para poder llevar la ropa de viaje y espero que se seque, porque en caso contrario, mi maleta tendrá que ir vacía. Así se pondran contentos los de Ryanair.
Resulta que para la cadena humana había que reservar sitio por internet, hasta un máximo de 400 mil personas, pero la afluencia de 1.600.000 ha desbordado todas las previsiones.
Había quien no quería hacer un hueco, había quien estaba esperando las 17:14 (por el año de 1714) desde las tres de la tarde, pero en general todo se desarrolló en un ambiente festivo.
Mis hijos y nietos fueron al punto mas cercano, que era donde desemboca la carretera de "La cobertera" en Bellvei, desde Calafell, ya que seguía un recorrido por poblaciones mas importantes hacia Barcelona, que no por la costa. Mis sobrinos fueron a Sant Feliu.
Como me ocurrió a mi con el "fin de la cita", pues Jorge iba informando de lo que decían en las cadenas internacionales, donde no se cortaban lo mas mínimo en hablar de "secesión" o "independencia", palabras que en España le producen un sarpullido a mas de uno.
Yo no estoy seguro de que tampoco sea eso, sino del derecho de consulta, que además recoge la Constitución Española de 1978, creo que todavía en vigor, aunque a veces tengo dudas de ello, por los atropellos que recibe. En Quebec o en Escocia llevan varias y nadie se rasga las vestiduras por ello. Aquí en España, como nuestros políticos están acostumbrados a pasarse los resultados de los referendum por el arco del triunfo, no entienden mucho de consultas y mucho menos de acatarlas.
Y como el 11 de septiembre, siempre aparece algún "iluminati" en forma de descerebrado, como ocurrió en la Guerra de Secesión Española, en Chile o en Nueva York, pues ayer no podían faltar a su cita.
Varios chalados atacaron la sede de la Generalitat en Madrid, al grito de "Catalunya es España" y los de Intereconomía, haciendo amigos, pasearon una avioneta llamando a la unidad de la patria y todo ese discurso que utilizan.
Para varios medios de Madrid, la noticia estaba en las goteras del Congreso de los Diputados y es que esto se hunde y ya no se respeta nada. Lo típico, te gastas una pasta en la obra y al primer aguacero todo a tomar vientos, ¿pero quien ha hecho esa chapuza?. Seguro que no lo dicen.
En Calafell, el monumento a los "Presidents" de Catalunya estaba lleno de flores de todos los partidos e instituciones, excepto el PP, que estarían tomándose una "relaxing cup de cafe con leche" en La Valenciana o en el Calafell 66 y se les pasó la hora.
Resulta que para la cadena humana había que reservar sitio por internet, hasta un máximo de 400 mil personas, pero la afluencia de 1.600.000 ha desbordado todas las previsiones.
Había quien no quería hacer un hueco, había quien estaba esperando las 17:14 (por el año de 1714) desde las tres de la tarde, pero en general todo se desarrolló en un ambiente festivo.
Mis hijos y nietos fueron al punto mas cercano, que era donde desemboca la carretera de "La cobertera" en Bellvei, desde Calafell, ya que seguía un recorrido por poblaciones mas importantes hacia Barcelona, que no por la costa. Mis sobrinos fueron a Sant Feliu.
Como me ocurrió a mi con el "fin de la cita", pues Jorge iba informando de lo que decían en las cadenas internacionales, donde no se cortaban lo mas mínimo en hablar de "secesión" o "independencia", palabras que en España le producen un sarpullido a mas de uno.
Yo no estoy seguro de que tampoco sea eso, sino del derecho de consulta, que además recoge la Constitución Española de 1978, creo que todavía en vigor, aunque a veces tengo dudas de ello, por los atropellos que recibe. En Quebec o en Escocia llevan varias y nadie se rasga las vestiduras por ello. Aquí en España, como nuestros políticos están acostumbrados a pasarse los resultados de los referendum por el arco del triunfo, no entienden mucho de consultas y mucho menos de acatarlas.
Y como el 11 de septiembre, siempre aparece algún "iluminati" en forma de descerebrado, como ocurrió en la Guerra de Secesión Española, en Chile o en Nueva York, pues ayer no podían faltar a su cita.
Varios chalados atacaron la sede de la Generalitat en Madrid, al grito de "Catalunya es España" y los de Intereconomía, haciendo amigos, pasearon una avioneta llamando a la unidad de la patria y todo ese discurso que utilizan.
Para varios medios de Madrid, la noticia estaba en las goteras del Congreso de los Diputados y es que esto se hunde y ya no se respeta nada. Lo típico, te gastas una pasta en la obra y al primer aguacero todo a tomar vientos, ¿pero quien ha hecho esa chapuza?. Seguro que no lo dicen.
En Calafell, el monumento a los "Presidents" de Catalunya estaba lleno de flores de todos los partidos e instituciones, excepto el PP, que estarían tomándose una "relaxing cup de cafe con leche" en La Valenciana o en el Calafell 66 y se les pasó la hora.
Hoy es el cumple de Blanquita. Yo ya la felicité, como es mi deber. Desde aquí y desde la distancia muchas felicidades de nuevo. Lo mejor es cuando los niños le canten el "cumpleaños feliz", porque es que además lo hacen fenomenal.
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