miércoles, 21 de noviembre de 2012

MEMORIAS DE UN PARADO LXXXV - mas morriña -

Ayer fue un día un poco fastidiado, no por las cosas que estoy emprendiendo, que todas van bien y no me puedo quejar, sino porque mi nieto pequeño cumplía un añito.

Estuve todo el día acordándome de ellos y al mediodía llamé a mi hijo al trabajo, para decirle que a la tarde les llamaría. Ya no me podía aguantar mas y eso que nunca llamo a los trabajos, a no ser que ocurra como en el poblado galo de Asterix y se caiga el cielo sobre nuestras cabezas.

Me acordaba del día que nacio (20N) y que el nieto mayor estuvo todo el día con nosotros. Jugamos, nos divertimos y se cansó tanto que cuando fuimos a Barcelona a ver al pequeño se quedó dormido del todo.

Lo tuve que llevar en brazos desde el coche hasta la Clínica (antes merendamos por supuesto) y cuando llegamos, vio a su madre en la cama, a un ser pequeñito por allí y el ambiente de hospital, pues se abrazó a mí muy fuerte, porque se trataba de "El mundo contra mí", "¿porqué me tiene que pasar esto a mí?" y ¿Si yo soy el Centro de Atención del Universo, no pretenderá venir alguien a ocupar parte de ese Centro?.

A todos, nos ha sucedido eso, porque yo soy también el mayor de tres hermanos, pero la ternura con la que Gerard hace las cosas, siempre, hace que pasara un día, como dirían los castizos "jodido".

Después, por la tarde, encima hablé, a través de Skype, con todos, incluída mi esposa (que está muy guapa) y, claro, todavía se acentuó un poco mas la "morriña" de ese momento. Es que eso es muy difícil de curar. Yo no sé que ocurre en otros países, pero los españoles jamás olvidamos el origen y siempre lo llevamos en nuestra mente y nuestro corazón.

Ahora, que gracias a nuestros políticos, nos vemos obligados a marchar de nuevo de nuestra tierra, ya que son incapaces de crear empleo y facilidades para desarrollar la vida, quiero desear a todos los que emprenden el Camino, que lo puedan llevar bien y, al menos, con dignidad y entereza.

Los españoles siempre fueron emigrantes, los vascos, gallegos y catalanes tuvieron que ir a ultramar, en busca de fortuna. Los castellanos, andaluces y murcianos fueron a Francia, Suiza, Alemania y los mas afortunados encontraron un trabajo de interior en las zonas industrializadas de Cataluña y País Vasco.

Bueno, unos amigos, me han dicho que nos juntemos el domingo para seguir las elecciones catalanas en directo. Los míos nunca ganan, pero será una manera de hablar de allí y compartir unas cervezas y un poco de vino, para ahogar las penas.

1 comentario:

jopasmex dijo...

la vida es un cilo en que se van repitiendo los acontecimientos españa fue un pais de emigrantes, despues paso a recibir emigrantes, a volver a ser emigrantes