domingo, 22 de septiembre de 2013

MEMORIAS DE UN PARADO CCLXXII - España -

Hoy hace un día raro. A unas pocas horas de que empiece el otoño, la primavera en el hemisferio sur, sigue haciendo calor y una mas que buena temperatura, mientras no hay atisbo de que una sola nube venga a descargar agua por estos contornos.

Mis padres, con mi hermano de conductor, ya han llegado bien a Barcelona y ahora, con la enfermedad de mi padre, pues les espera una nueva etapa, que mi madre deberá afrontar con paciencia, mientras pueda y las fuerzas se lo permitan.

El tiempo que han estado aquí, yo he hecho todo lo posible y he estado disponible las 24 horas. Ahora mi vida no pasa por irme a Barcelona, sino que sigue otro camino diferente, que, como decía Sancho Panza en el Quijote (arrieritos somos y por los caminos nos encontramos) se irá cruzando en las diferentes etapas que tiene esta vía.

Ahora son otros los que deberan afrontar estos retos y espero y deseo que lo hagan con el mismo cariño y paciencia que yo he tenido. Estoy seguro que así va a ser.

Mientras tanto, mis señas identitarias, hay una serie de personajes, mas o menos públicos, especie de tertulianos, que son como mercenarios que se venden al mejor postor, con tal de facturar, que quieren borrar o desdibujar, de forma extraña, confundiendo el debate, seguramente de forma voluntaria porque ya se sabe que "a río revuelto, ganancia de pescadores".

Mi abuelo, vino a Catalunya, concretamente a Barcelona, a principios de 1.931, con un hijo de 4 años, otro de 2 años y otro (mi padre) recien nacido. Aunque su tierra era Salamanca, procedían de Vigo, paso obligado laboralmente para poder llegar a la Ciudad Condal, que era donde querían establecerse y donde definitivamente lo hicieron.

Mi familia, desde entonces, es catalana, yo soy catalán, mis hijos y nueras son catalanes, mis nietos son catalanes y a pesar de que vivo fuera de esa tierra, la amo profundamente y deseo lo mejor para ella, a pesar de que algún pepero, o alguno de los que apoyó el ataque a la Blanquerna, crea que solo tiene valor lo de Juanito Valderrama cantando "el emigrante".

A mi entender, querer a Catalunya, pasa por separarse de un territorio que nos odia y que por algún extraño motivo, quizá un antiguo derecho de conquista, quiere tener sometido en contra de su voluntad.

¿Hay alguien que cree que no es así?. Pues aparte de la guerra de cifras ¿Qué problema hay en preguntar?, ¿Qué podría existir una manipulación?. Quizá es que los que piensen que la opinión en un referéndum puede estar manipulada, no deben de pensar que el actual gobierno español ha incumplido todo su programa electoral ¿eso no es manipulación?.

Después oigo y leo una serie de cosas que aún me cuestan mas de entender:

Hay quien se cree que apoyar el derecho de consulta o de autodeterminación es apoyar, o aún peor, votar a Convergencia. Esa opción es una de tantas de las que hay en Catalunya, donde hay muchas mas, no como ocurre en España donde el bipartidismo ha eclipsado todo lo demás y tristemente solo ha quedado una panda de amigotes que se reparten el pastel unas veces con nombre PP y otras veces con nombre PSOE, dependiendo de los tiempos que corren.

La via catalana, además, la convocó la asamblea nacional de Catalunya, no Artur Mas.
Había que reservar sitio por internet, hasta un total de 400 mil personas, pero fueron muchos mas los que acudieron a ella. Lo que ocurre es que los de siempre dicen: "se reservaron todos los sitios y esos son los que fueron, no mas".

Yo sin vivir allí, solo de amigos y conocidos que fueron sin reservar sitio, podría hacer una lista importante de asistentes.

Otro de los errores mas corrientes que me encuentro es confundir Barcelona con toda Catalunya, donde hay otra realidad, otros pueblos, otras provincias diferentes. Las grandes ciudades tienen vida propia y muchas veces no son representativas del lugar donde se encuentran. Yo conozco una realidad francesa y no conozco París. Londres está en Inglaterra, pero los habitantes de Manchester y Liverpool dicen que la verdadera Inglaterra son ellos.

Acabo de venir de Milán y la Lombardía es tan Italia como la Catania. Por supuesto que se puede conocer mucha realidad italiana sin estar en Roma.

Lo mismo ocurre en Catalunya, lo que pasa es que el dia a día de esos territorios no es el del funcionario renegado que aprobó el último la oposición, lo enviaron a Catalunya, a un pueblo del que ni siquiera sabe el nombre y que está esperando el concurso de traslado para largarse a Zamora, Burgos o León. Mientras tanto, no hace mas que fastidiar para que sus hijos no aprendan catalán,  no se adapten a esa tierra y ¡oh terror!, quieran quedarse en ella.

Muchos expatriados por "business" vuelven a España, dejando un futuro muy prometedor a sus espaldas, para evitar que sus hijos echen raíces en "tierras extrañas". Yo ha oído a muchos: "a ver ¿que hago el resto de mi vida en Berlín?".

Lo que se pide en este momento es una "consulta", si tan seguro están los bienpensantes en que fueron a la via catalana 3 ó 4 de los cuales dos estaban manipulados ¿Qué miedo tienen?, la victoria de los que estén en contra será aplastante, ¿no?.

De los 7 millones de habitantes, según ellos,  6 millones ochocientas mil estarán en contra, porque iran todos a votar, como sucede en España, ¿no?. La abstención, si es que la hay porque estos dicen que los que no se mueven están a favor de ellos y le llaman "mayoría silenciosa" favorecerá a quien los que mandan digan ¿no?. ¿o no habrá abstención?, ¿o no habrá votos en blanco y nulos?.

Repito, estoy oyendo una cantidad de cosas que me hacen dar vueltas a la cabeza y no entender nada de nada, pero tanto que se habla de que estamos en el siglo XXI, cuando hay que negar un derecho tan simple como el de consulta o autodeterminación, mas parece que nos encontramos en la época de las guerras de descolonización, cuando franceses, ingleses y americanos hicieron trizas el sudeste asiático.

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