jueves, 22 de mayo de 2014

MEMORIAS DE UN PARADO CDVIII - Violencia -

Esta mañana hace so, aunque nubes amenazadoras atisban por el horizonte. Siguen los "surfistas" haciendo su particular agosto, con unas olas altas que les permiten disfrutar.

Parece que esto no se acaba. Primero, los comentarios sobre el magnicidio de León, después siguieron las animaladas que se dijeron tras el partido de baloncesto Real Madrid Maccabi, ahora, aquí al lado, en Vilanova i La Geltrú, apedrean el vehículo donde llegaron y marcharon los dirigentes del PP, Cristobal Montoro y Alicia Sanchez Camacho.

No hay mas que mirar la noticia en cualquier periódico y leer los comentarios que siguen. El clima de violencia no se acaba y deberíamos plantearnos entre todos si no deberíamos contribuir a que esto se enfríe.

Quizá no sea suficiente con darles a los políticos una "patente de corso" cada cuatro años sin que sean capaces de rendir cuentas, durante ese período.

Quizá no sea suficiente esas instrucciones de juicios tan largas, en las que dan la impresión de que no sucede o no va a suceder nada de nada, porque finalmente, a las malas, el círculo de protección finalizará con un indulto.

Quizá no sea suficiente, explicar que los datos macroeconómicos no llegan a las familias con una necesidad real de comer todos los días.

Quizá no tenemos una democracia tan consolidada como nos quieren hacer ver.

Ayer mismo, en un grupo de amigos, muchos expresaban que no querían que con su dinero se pagara el sueldo de un eurodipitado y sus prebendas, pero nadie tenía claro si era mejor votar a un partido minoritario, no consolidado, como PODEMOS; VOX; RED; VOTOS EN BLANCO o cualquier otro, no votar, o simplemente ejercer el voto en blanco real, sin meter ninguna papeleta en el sobre.

Todos tenían claro, no votar al bipartidismo PPSOE, pero discrepaban en la posible utilización del resto de votos o abstención, porque dada la situación de que los políticos pueden hacer cualquier cosa por conseguir un escaño, fueran capaces de utilizar esa masa de otro tipo de protesta.

Quizá los políticos y la propia administración deberían explicar, con mas claridad, que sucede en todos esos casos.

Mientras tanto, los demás, los excluídos de la Sociedad, esperamos un milagro que nos devuelva a la vida, o por lo menos, que nos permita afrontarla sin ese ahogo que nos atenaza. Somos un 20% de la población o uno de cada 5, que no llegamos, que no podemos, que no pensamos en mañana, porque no sabemos como vamos a pasar el dia de hoy.

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