Esta tarde a las 18,20, tenemos una temperatura exterior de 25,8ºC y una interior de 23,1- La humedad relativa no la puedo ver porque Blanquita acaba de fregar todo y la estación de la humedad relativa está en otro sitio, por lo que si voy a verla, buuuff, por no oir la bronca, mejor os la digo mañana.
Se nubla, sale el sol y se está bien, ha hecho un día bastante agradable y además no hay que regar porque el suelo está todavía bastante húmedo.
Niñas y niños, esta es la lección de hoy. Nunca piseis el suelo mojado que vuestra madre acaba de fregar, porque es de las mayores ofensas que le podeis hacer.
Esta mañana, después de 4 días de festejos, se acababan con una misa en la Ermita, pero nosotros no hemos podido ir, porque teníamos que hacer una serie de gestiones en Vitigudino, pero si se trata de ir andando hasta allí, aunque en otros momentos voy sin pestañear, ahora no estoy para esos trotes, aunque ya estoy en vías de recuperación, afortunadamente, que junto a un poco de reposo y descanso, me van a poner en órbita en muy poco tiempo.
La prensa regional se hace cargo del seguimiento de los festejos taurinos, que sin ellos, por estas tierras no tendrían sentido las Fiestas Patronales, porque hay mucha afición, sin mas.
Yo aquí en el pueblo no opino, porque como le prometí a mi madre que no hablaría de política, pues lo que pienso me lo callo o lo escribo en el blog, que para eso lo tengo, para decir lo que me de la gana, claro.
Después viene el misterio del "extraño camión menguante", para la fiesta. El primer día vino un camión superenorme, con una orquesta superenorme y un espectáculo superenorme. El segundo día vino un camión mas pequeño, con una orquesta mas pequeña y como había llovido la metieron así como a las siguientes en el juego de pelota cubierto.
El tercer día ya vino una camioneta grande, con una orquesta pésima, que además ayer amenizaron el baile aperitivo, pero la sangría o "limonada" como se llama aquí los hicieron mas soportables.
Ayer, último día, vino una furgoneta pequeña con un trío, música enlatada pero voz en vivo y como era tan pequeña pues en el sitio cerrado, se oía bastante bien.
Lo mas divertido es que participa todo el mundo en la Fiesta y todo el mundo baila, incluso los señores mas mayores, que tienen un ánimo que ya me gustaría a mi tenerlo cuando llegue a su edad.
Todo el mundo baila (bailamos) con nuestro estilo, unos los haremos mejor, otros lo haremos peor, pero eso de estar en la barra o en el bar, apalancado y sin moverse, aquí no existe.
Digo yo, que el análisis de porqué se empieza con lo grande y se acaba con lo pequeño, estará estudiado por los expertos en marketing, para ver si así se actúa de forma correcta o hay que emplear otra estrategia, porque, no lo dudemos, el equipo de Gobierno, sea el que sea, se la juega con las Fiestas Patronales en un año electoral. O lo hacen bien (que lo han hecho) o sus posibilidades de continuar en la Casa Consistorial son prácticamente nulas.
Ayer, también, a las 6 de la tarde hubo teatro. Fueron unos sainetes modernos y divertidos. Entre medio cantaba un señor, que hace muy poco que lo conozco, pero curiosamente el motivo de que nos pusiéramos a hablar, era que nos encontrábamos por todas partes. Si yo tiraba por una calle, él también. Si lo hacía por otra, él también. Si iba a buscar moras por el camino del Pozo Airón, el salía a pasear por ese camino.
Bueno, pues este señor, la primera canción que cantó fue la de "Campanera", que me hace mucha gracia porque una de mis películas de cabecera es "Manolito Gafotas", entrañable. Cuando se pone a cantar en el camión de su padre esta canción y hablan: ¿pero quien te ha enseñado esto?, ¿el abuelo?.
Se nubla, sale el sol y se está bien, ha hecho un día bastante agradable y además no hay que regar porque el suelo está todavía bastante húmedo.
Niñas y niños, esta es la lección de hoy. Nunca piseis el suelo mojado que vuestra madre acaba de fregar, porque es de las mayores ofensas que le podeis hacer.
Esta mañana, después de 4 días de festejos, se acababan con una misa en la Ermita, pero nosotros no hemos podido ir, porque teníamos que hacer una serie de gestiones en Vitigudino, pero si se trata de ir andando hasta allí, aunque en otros momentos voy sin pestañear, ahora no estoy para esos trotes, aunque ya estoy en vías de recuperación, afortunadamente, que junto a un poco de reposo y descanso, me van a poner en órbita en muy poco tiempo.
La prensa regional se hace cargo del seguimiento de los festejos taurinos, que sin ellos, por estas tierras no tendrían sentido las Fiestas Patronales, porque hay mucha afición, sin mas.
Yo aquí en el pueblo no opino, porque como le prometí a mi madre que no hablaría de política, pues lo que pienso me lo callo o lo escribo en el blog, que para eso lo tengo, para decir lo que me de la gana, claro.
Después viene el misterio del "extraño camión menguante", para la fiesta. El primer día vino un camión superenorme, con una orquesta superenorme y un espectáculo superenorme. El segundo día vino un camión mas pequeño, con una orquesta mas pequeña y como había llovido la metieron así como a las siguientes en el juego de pelota cubierto.
El tercer día ya vino una camioneta grande, con una orquesta pésima, que además ayer amenizaron el baile aperitivo, pero la sangría o "limonada" como se llama aquí los hicieron mas soportables.
Ayer, último día, vino una furgoneta pequeña con un trío, música enlatada pero voz en vivo y como era tan pequeña pues en el sitio cerrado, se oía bastante bien.
Lo mas divertido es que participa todo el mundo en la Fiesta y todo el mundo baila, incluso los señores mas mayores, que tienen un ánimo que ya me gustaría a mi tenerlo cuando llegue a su edad.
Todo el mundo baila (bailamos) con nuestro estilo, unos los haremos mejor, otros lo haremos peor, pero eso de estar en la barra o en el bar, apalancado y sin moverse, aquí no existe.
Digo yo, que el análisis de porqué se empieza con lo grande y se acaba con lo pequeño, estará estudiado por los expertos en marketing, para ver si así se actúa de forma correcta o hay que emplear otra estrategia, porque, no lo dudemos, el equipo de Gobierno, sea el que sea, se la juega con las Fiestas Patronales en un año electoral. O lo hacen bien (que lo han hecho) o sus posibilidades de continuar en la Casa Consistorial son prácticamente nulas.
Ayer, también, a las 6 de la tarde hubo teatro. Fueron unos sainetes modernos y divertidos. Entre medio cantaba un señor, que hace muy poco que lo conozco, pero curiosamente el motivo de que nos pusiéramos a hablar, era que nos encontrábamos por todas partes. Si yo tiraba por una calle, él también. Si lo hacía por otra, él también. Si iba a buscar moras por el camino del Pozo Airón, el salía a pasear por ese camino.
Bueno, pues este señor, la primera canción que cantó fue la de "Campanera", que me hace mucha gracia porque una de mis películas de cabecera es "Manolito Gafotas", entrañable. Cuando se pone a cantar en el camión de su padre esta canción y hablan: ¿pero quien te ha enseñado esto?, ¿el abuelo?.
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